23 abril 2011

04 - GREAT ESCAPE

Era la quinta calada y todavía no había decidido qué poner. Con la cerveza en la mano paseó lentamente por su colección de discos. Era su único tesoro, prácticamente lo único que había podido arrastrar en la mudanza.

The Kooks, Radiohead, Blur, Oasis… había intentado mil veces ordenarlos alfabéticamente, pero a los tres días, Bunbury era vecino de The Killers y Los Piratas se arrimaban todo lo que podían a Iván Ferreiro.

13 abril 2011

Caramelos amargos

¿La recuerdas? Era una sensación horrible. Te daban un caramelo que te encantaba, y tú te lo llevabas a la boca enseguida, deseando saborearlo. Pero, cuando casi no habías podido percibir el dulzor, la pequeña golosina se deslizaba por tu garganta y no podías disfrutarla. Tú te echabas a llorar, pero no quedaban más. El caramelo había desaparecido demasiado rápido. Te morías de la rabia.

05 abril 2011

Telemierda

Lo voy a decir ya: Estoy hasta los cojones de la mierda de programas del corazón. De verdad. No puedo más. Hasta ahora me he limitado a ignorarlos, pero he reventado. Sin motivo alguno, no ha pasado nada fuera de lo normal, pero cuando llueve mierda siempre acaba molestando el olor, aunque no te haya caído a ti.

Y lo más jodido es que ni siquiera los veo. No, ni “haciendo zapping cinco segundos” ni hostias...realmente no sé ni los que se están emitiendo ahora. No sé los nombres de todos los que se gritan como si fuera un gallinero (cuando veía “Sé lo que hicisteis” conocía a alguno, pero ya no) Pero sé que existen...y me exaspera. Y lo que es peor, creo que los que los siguen, aunque sólo sean cinco minutos, son gilipollas. Y si tú, que estás leyendo esto ahora, ves alguno de esos programa, eres gilipollas. Así de claro.

29 marzo 2011

Pit stop

Estas noches son como una parada en boxes, pero de los equipos buenos, los que sólo tardan segundos en cambiarte los neumáticos. Y casi mejor, porque si estuviera demasiado tiempo dando vueltas a las cosas...

En fin, que no puedo dormir y miro hacia atrás, hacia adelante...y sigo desorientado. Además leo las últimas entradas del blog y la cosa tampoco parece haber avanzado mucho. Y lo peor es que, dadas las circunstancias, no sé si eso es bueno o malo.

12 marzo 2011

Un cuento con alas...

- ¿Por qué no vuelves a saltar? A lo mejor ahora lo consigues

Las risitas ahogadas ya ni siquiera le molestaban, había aprendido a pasar de ellas. Con un par de empujones a las ruedas, llevó la silla hasta la rampa de entrada de la oficina.

Era el primer día que volvía a trabajar después de lo que pasó. Le había costado, pero su vida había vuelto a una relativa normalidad. Sólo le quedaba una semana en la silla de ruedas, y le habían prometido que casi no sufriría secuelas

- "Sólo quedarán algunas cicatrices internas, nada importante. Dentro de lo que cabe has tenido suerte"

Esa última frase le había dolido más que la pierna.