22 abril 2008

La sensación...

Hace ya un mes tuve la gran oportunidad de poder asistir al Campeonato de España de selecciones en categoría alevín. Dejando a un lado la gran experiencia que constituyó a todos los niveles, me sirvió para recordar una sensación que lamentablemente había olvidado…

Ocurrió mientras veía el partido de semifinales entre Madrid y Cataluña. La verdad es que la superioridad de los catalanes era enorme, corriendo y defendiendo ponían en muchos apuros a la selección madrileña, impidiendo incluso a veces que pasaran de medio campo. La verdad es que el juego de Cataluña era minibásket en estado puro (como lo es desde hace ya muchos años), una auténtica gozada que me hizo sentirme afortunado por estar viendo el partido, pero no me refiero a esa sensación.